sexta-feira, 25 de maio de 2012

Dos argentinos


Dos Argentinos
Menos mal que del pasaje del tren zafo con un “jubilado” al pasar el molinete, el inspector me deja seguir, porque con esta pinta si no soy jubilado soy un viejo pobre…que al final es lo mismo. Me falta un año y ocho meses para jubilarme por edad…dos inviernos mas, va a ser difícil, pero ya e pasado algunas mas bravas que esta, que esta medio pesada esta ves.
Salí del la estación  por el túnel que da al norte, ahora eran veinte cuadras hasta lo de mi hermano “el rezongón”, a la tarjeta “Sube” no la puedo engrupir con “jubilado”.
Lo voy a visitar porque esta algo enfermo, y de paso para garronearme el almuerzo que mi cuñada, seguro, va a poner para mi en la mesa.
Demore un poco en salir del túnel porque las escaleras ya no son como antiguamente, bueno, mis piernas ya no son como antiguamente.
Justo en la boca del túnel había una mesa, donde un pibe de unos veinte años vendía escarapelas…que ganas de tener una en la solapa, me acorde de cuando iba a la escuela y mi vieja, para esta fecha, me ponía una del tamaño de un plato en el delantal blanco..
Vendía escarapelas, banderitas de papel  y tenía unas de tela, de esas con el sol bordado, dorado y sonriente, grandes…lindas.
Pase despacio y mire las escarapelas, si hubiera tenido para el colectivo me hubiera comprado una, y me hubiese hecho las veinte cuadras desfilando…como en el colegio.
El pibe estaba parado al lado de la mesa y cuando pase agarro una escarapela y sin decirme nada me la uso en la vieja solapa de mi campera, lo mire a los ojos…
_.No tengo un guita pibe…_
_.Se la regalo._
me dijo en el medio de una sonrisa franca
_.Seguro que usted se la merece._
Le quise decir algo así como que el se la merecería pero el llanto me llego de golpe, arrastrando mis miserias, mis necesidades…mi pobre vida.
No me gusta que me vean llorar, me di vuelta y empecé a caminar…no había hecho ni tres metros cuando sentí:
_.Señor…señor._
Cuando me volví el pibe estaba al lado mío, con una bandera de las bordadas, de las mas lindas, me la estaba ofreciendo con las dos manos, como debíamos recibir la bandera que bajábamos del mástil todos los días en la escuela…y así la recibí
Con la cara llena de lagrimas solo atine a decirle
_.Gracias hijo…._
Y el me contesto con los ojos húmedos:
_.De nada compatriota._

Gabriel Criscuolo

25/5/2012


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